Diálogos de financiamiento sostenible para el sector pesquero ribereño en México

 

2023 ha sido un año muy activo en temas de financiamiento sostenible. Solo en el mes de junio se llevaron a cabo dos foros de gran relevancia en el país. El primero, llamado Financiamiento a las comunidades para la conservación y restauración de la biodiversidad, convocado por Banco de México, PNUD-BIOFIN, GIZ y la CEPAL, y el segundo, el Festival de Financiamiento Sostenible organizado por Secretaría de Hacienda, Nacional Financiera y la Agencia de Cooperación Alemana, GIZ. 

Ambos espacios transmitieron algunos mensajes clave muy claros. Uno es que la demanda de instrumentos de financiamiento sostenible crece de manera acelerada, y una de las razones es porque cada vez hay más actores interesados -u obligados- a que sus inversiones no solo no generen daños ambientales, sociales o territoriales, sino que impacten de manera positiva en esos mismos ejes. Otro mensaje muy relevante tiene que ver con resolver una práctica recurrente y difícil de rastrear: el greenwashing, que básicamente es una simulación llevada a cabo para aparentar que el dinero se invierte con fines sociales y medioambientales, cuando en realidad no es así. Esta dificultad para dar seguimiento puntual a los recursos financieros inyectados en la economía, comprobar y evaluar sus impactos, permite escenarios donde el financiamiento sostenible podría no estar generando ninguna diferencia respecto a otros instrumentos que no deben cumplir con criterios ASG (ambientales, sociales y de gobernanza). 

Un tercer mensaje a destacar tiene que ver con la dificultad (y necesidad) de crear estrategias que hagan posible el aterrizaje de instrumentos y recursos de financiamiento sostenible en territorio. Es decir, lograr bajar esas cifras millonarias que crecen año con año como un intento de resolver las mayores problemáticas como el deterioro ambiental, la desigualdad sistémica y el cambio climático, a las comunidades rurales. En este sector se encuentran las personas y cooperativas que se dedican sobre todo a la producción primaria de pequeña escala y enfrentan barreras muy altas para acceder a recursos económicos. Al mismo tiempo, tienen en sus manos el cuidado (o deterioro) de los recursos naturales que utilizan para llevar a cabo sus actividades económicas, y por ende, su rol es crítico para mantener y restaurar la biodiversidad y equilibrio ecosistémico. 

Dada la importancia que tienen los recursos financieros para transitar hacia prácticas productivas que no sólo no dañen, sino que restauren el ecosistema y generen verdadero desarrollo económico y comunitario, y para entender de mejor manera el panorama en el sector pesquero ribereño en México, EDF de México en colaboración con Impacto Colectivo por la Pesca y Acuicultura Mexicanas (ICPMX) llevaron a cabo una serie de Diálogos de financiamiento sostenible para obtener información de primera mano sobre algunos de los mayores retos, necesidades y oportunidades para el acceso a financiamiento sostenible desde la perspectiva de los diversos agentes involucrados. Específicamente desde el sector financiero, productivo y los intermediarios, que tienen un rol facilitador o articulador entre la oferta y demanda de este tipo de recursos. 

Algunas de las recomendaciones generales obtenidas a través de los Diálogos tienen que ver con llevar a cabo el trabajo necesario para lograr instrumentos financieros flexibles, adaptados a las necesidades y contexto del sector pesquero ribereño, para lo cual se requiere de mayor acercamiento entre los diferentes sectores del ecosistema para disminuir la brecha de conocimiento y entendimiento, y para generar esquemas adhoc, por ejemplo, mecanismos de garantías en una actividad productiva y económica que por su naturaleza es riesgosa, pero que también puede ser rentable y sostenible en términos ambientales, sociales. 

También se identificó la necesidad de continuar sensibilizando al sector productivo ribereño sobre los beneficios de incorporar prácticas sostenibles en sus actividades y procesos, generar mayor valor agregado a sus productos, y fortalecer sus unidades productivas. La formalidad del sector y sus capacidades tecnológicas, administrativas, operacionales y de gobernanza interna, son cruciales para lograr el acceso y uso de recursos financieros etiquetados con fines de sostenibilidad. 

Los diálogos de financiamiento sostenible confirmaron problemáticas crónicas, por ejemplo, la normalización de instrumentos financieros que se ocupan día a día por la gran mayoría de personas pescadoras del sector ribereño. Un financiamiento de alto costo que genera círculos viciosos de deuda, pero que al mismo tiempo les es conveniente por la facilidad de obtener liquidez inmediata sin procedimientos o requisitos difíciles de cumplir. “Les debemos antes de salir a pescar” es una frase que resonó en uno de los Diálogos. 

Por último, algunas acciones que desde las organizaciones de la sociedad civil podemos realizar, y que surgieron como relevantes en este ejercicio, tienen que ver con la construcción de metodologías que midan la rentabilidad del sector cuando aplica prácticas sostenibles, así como la elaboración de una taxonomía propia del sector pesquero ribereño que facilite el flujo de financiamiento sostenible. Por otra parte, y para cerrar con broche de oro, se identificó la necesidad de transformar narrativas para contrarrestar los prejuicios inherentes al sector, y lograr que las personas lleven su mirada al extenso mar que rodea nuestro territorio, valore el producto pesquero y conozca los servicios ecosistémicos que genera. 

Hace falta mucha información y mucha conciencia sobre la relación de los océanos y el cambio climático, la prosperidad de las comunidades costeras, y la seguridad alimentaria. Invertir en la pesca ribereña tiene beneficios que van más allá de lograr un rendimiento aceptable a través de un proyecto bancable. Dirigir recursos en prácticas productivas, económicas y sociales que buscan la salud oceánica y al mismo tiempo el desarrollo y resiliencia de las cooperativas y comunidades pesqueras, es un acto consciente e inteligente, que genera las externalidades que hoy día se requieren, dadas las problemáticas que enfrentamos como país y como un territorio vital, parte de este planeta.       

Te invitamos a leer el documento del Proyecto y su Resumen Ejecutivo donde encontrarás la información detallada y la ruta crítica propuesta para acortar brechas entre la oferta y demanda de financiamiento sostenible en el sector.