El Environmental Defense Fund (EDF) invitó recientemente a Julie Kuchepatov, fundadora de la organización Seafood and Gender Equality (SAGE), para dialogar con tres integrantes del equipo del EDF sobre el papel que desempeñan las mujeres en la pesca en pequeña escala en sus respectivos países. Julie habló con Onesya Damayanti, especialista en Extensión Comunitaria, en Indonesia; Layla Osman, gerenta de Pesca en Pequeña Escala, para la Corriente de Humboldt, y Ana Suárez, especialista senior en Capacitación y Alianzas Estratégicas, Programa Océanos en México. En esta conversación, Julie y nuestro equipo analizan la importante función que cumplen las mujeres en las comunidades costeras de todo el mundo, y como su trabajo en el sector pesquero añade gran valor.
Julie: Gracias por aceptar unirse a esta conversación del día de hoy. Estoy ansiosa por conocer más sobre sus experiencias de trabajo con la pesca en pequeña escala, sobre todo, cuando se trata de las mujeres en el sector pesquero y sus comunidades. Les pido que se presenten y nos cuenten cómo las mujeres participan en la pesca en pequeña escala, según su experiencia.
Layla: Soy Layla Osman, Directora de Pesca en Pequeña Escala y Coordinadora principal de las Redes de Aprendizaje sobre la Pesca en Pequeña Escala en la región de la Corriente de Humboldt, situada en Chile y Perú. Las principales pesquerías con las que actualmente estamos trabajando son los denominados «peces olvidados», es decir, los peces importantes para las comunidades pesqueras vulnerables de las costas, aquellos que son utilizados para las economías locales y de subsistencia, y que son parte de la cultura pesquera de las comunidades costeras. Estamos trabajando con diversas especias de peces olvidados de la región de Los Ríos, el archipiélago Juan Fernández y las islas Desventuradas.En primer lugar, aún no se termina de comprender el papel que tienen las mujeres, empezando por su papel como encargadas del cuidado del hogar y los hijos e hijas, y su responsabilidad de administrar los ingresos familiares y apoyar a sus familias de la mejor manera posible. En segundo lugar, las mujeres han contribuido a la pesca en pequeña escala dedicándole tiempo al desarrollo de las actividades pesqueras, donde cumplen distintas funciones, por ejemplo, como recolectoras de algas marinas, empleadas en las plantas de procesamiento y participantes en las actividades asociadas, que añaden valor a los productos pesqueros, el turismo y las iniciativas alimentarias. Pero hay esperanza: el papel de las mujeres está cambiando lentamente. Como ejemplo y símbolo de los tiempos que estamos viviendo en Chile, la Subsecretaría de Pesca —el organismo estatal que se ocupa de la ordenación pesquera— es liderada, por primera vez en su historia, por una mujer. Este año, se presentó una ley de igualdad de género para la pesca en pequeña escala, y se eligió a una reconocida dirigenta del sector pesquero nacional como la presidenta de la Unión Latinoamericana de la Pesca Artesanal. Así, queda claro que las mujeres pueden atender a sus familias, pero también pueden liderar.
Onesya: Trabajo en la costa este de la provincia de Lampung, en Indonesia, con la pesquería del cangrejo azul, donde la mayoría de las mujeres desempeñan un papel fundamental. Ayudan a reparar las redes, a sacar los cangrejos azules de las redes de enmalle, confeccionar las nuevas redes de enmalle para sus esposos, trabajan en la pequeña planta ubicada en la aldea y cumplen una función importante como «intermediarias» en la comercialización de los cangrejos azules.Ana: Vivo en México y divido mi tiempo entre el fortalecimiento de los conocimientos y las capacidades para fomentar la pesca sostenible con distintas comunidades pesqueras de México, y el fomento de la inclusión mundial en EDF, de modo que nuestra organización pueda ser un mejor reflejo de las personas y los lugares donde trabajamos. Tuve la oportunidad de trabajar con mujeres de distintas partes de México —desde los estados del norte, como Sonora, Sinaloa y Baja California hasta los estados del sur, como Yucatán y Quintana Roo— y he descubierto dos elementos comunes con respecto a la participación de las mujeres en la pesca: están muy comprometidas con la promoción de la pesca sostenible, pero a menudo no se las incluye ni reconoce en los procesos de toma de decisiones.
Las mujeres tienden a tener una comprensión más profunda de la importancia de pensar a largo plazo por ellas mismas y sus hijos e hijas. Asimismo, suelen ser mejores en la administración de los recursos y la creación de comunidad, en otras palabras, son menos individualistas. Sin embargo, en muy raras ocasionas se les concede poder de decisión o participan en los procesos de gestión.En México, las estadísticas oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revelan que solo 1 de cada 10 empleos en el sector pesquero son llevados a cabo por mujeres. Sin embargo, esta cifra podría menospreciar su papel porque las mujeres intervienen en toda la cadena de valor y producción: desde la pesca hasta el procesamiento y la venta de los productos pesqueros. En todo el mundo, esta cifra asciende a 5 de cada 10 empleos, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. La falta de visibilidad del trabajo de las mujeres en el sector pesquero de México puede deberse a la falta de posesión sobre recursos (a menudo trabajan con los permisos de pesca de sus padres o esposos) y a la falta de acceso a información sobre sus derechos y cómo ejercerlos.Julie: Parece que existen algunas características comunes que definen la participación de las mujeres en la pesca en pequeña escala en sus respectivas regiones, como la falta de participación en el liderazgo y la toma de decisiones sobre los recursos, y el desempeño de un papel importante en las actividades previas y posteriores a la pesca, como el arreglo de las redes y el procesamiento. Sus funciones son, por lo general, invisibles pero importantes. ¿Cuál es la importancia de sus funciones?
Ana: Las mujeres participan en toda la cadena de valor y producción: desde la pesca hasta llevar comida a la mesa. Conocen el negocio de primera mano y, como me manifestó en una oportunidad una monitora de la pesca de curvina en Sonora, ellas no quieren competir con los hombres, sino formar un equipo para ayudar a la actividad pesquera y sus comunidades a prosperar.Las mujeres tienen una conexión más fuerte con la comunidad y son acérrimas defensoras de la justicia ambiental. Por ejemplo, las cooperativas de mujeres en el Sistema Lagunar Altata-Ensenada del Pabellón, en Sinaloa, además de pescar y participar en distintas iniciativas de ordenación pesquera, como el Proyecto de Mejora de la Pesca centrado en la almeja, también organizan días de limpieza o campañas de restauración de los manglares. Tienen una visión más completa cuando se trata de pensar a largo plazo, y que es clave para la sostenibilidad.
Layla: Las mujeres apoyan y mantienen el estilo de vida, la cultura y el desarrollo de las comunidades costeras. Crían de forma segura a sus hijos e hijas, crean comunidad y llevan comida a la mesa todos los días. Las mujeres son grandes líderes y administradoras con habilidades que les permiten utilizar los recursos de los cuales disponen para lograr que sus familias y comunidades puedan prosperar. Las mujeres son muy conscientes de la situación de los entornos que las rodean, por lo tanto, son excelentes líderes para la administración sostenible de los recursos marinos.Julie: No cabe duda de que las mujeres son muy importantes para el éxito de la pesca en pequeña escala, sus comunidades y sus hogares. Observan lo que ocurre en el ambiente y aportan soluciones integrales e innovadoras para abordar estos desafíos. Entonces, ¿por qué son excluidas de los puestos de liderazgo y los procesos de toma de decisiones, según su experiencia?
Onesya: En Lampung, la pesca es considerada una actividad masculina, por lo que casi todos los pescadores son hombres. Al comenzar nuestro trabajo, la participación de las mujeres era muy limitada. Una cosa que noté fue que el aspecto socioeconómico de los conocimientos de la comunidad no era completo. Esto cambia si incluimos a las representantes mujeres, dado que son la principal figura en el plano familiar.Ana: Las mujeres son excluidas, en su mayoría, porque no siempre cuentan con la información sobre los derechos de participación, organización y tenencia de los recursos pesqueros. Esta información, por lo general, se comparte solo con los dirigentes de cooperativas o titulares de permisos, que casi siempre son hombres.
En el caso de México, los consejos de ordenamiento pesquero son organismos de gobierno donde las decisiones relacionadas con la ordenación del sector se debaten entre las autoridades pesqueras y locales, los pescadores, el mundo académico, las OSC’s y otros actores interesados. En muchas pesquerías, las mujeres no pueden ocupar un lugar en la mesa de negociaciones porque no tienen permisos de pesca, un requisito para participar en los consejos de ordenamiento pesquero. Y a menudo no les son otorgados permisos de pesca porque ellas mismas desconocen que pueden solicitarlos, o bien que pueden crear una cooperativa para pedir una concesión pesquera. Empoderar a las mujeres con información y orientación sobre el ejercicio de sus derechos de participación y organización puede ser un punto de inflexión, como ocurrió en el Sistema Lagunar Altata-Ensenada del Pabellón, donde ahora las mujeres participan en el recientemente constituido consejo de ordenación pesquera.
Layla: Las mujeres son excluidas porque son relegadas, sobre todo, al hogar y a la crianza de sus hijas e hijos. Vivimos en una cultura muy machista donde las mujeres son vistas como un objeto que se puede controlar y utilizar, sin reconocer las excelentes capacidades administrativas y de liderazgo que tienen. Excluir a las mujeres de los procesos de toma de decisiones desemboca en una gestión deficiente de los recursos marinos, la contaminación o degradación de los entornos marinos, menos beneficios de las negociaciones pesqueras, entre otras cuestiones.Julie: Estas son respuestas interesantes y, nuevamente, existe similitud en los temas planteados: culturas machistas y la falta de empoderamiento y conocimientos de las mujeres en el sector pesquero y las comunidades. ¿Cómo piensan que se verían las pesquerías en su región si las mujeres dejaran de involucrarse en la actividad?
Ana: Si las mujeres desaparecieran de la actividad pesquera, no podríamos comer pescado. Así de simple. Las mujeres no suelen salir a pescar, pero sí ocupan un número significativo de puestos de trabajo relacionados con el procesamiento, la venta y la exportación de pescado, y la gastronomía. Si las mujeres desaparecieran de la industria pesquera, se perderían más de 150 empleos en Atenea en el Mar: la primera planta de procesamiento de Baja California que obtuvo la certificación para exportar almeja generosa y otros tipos de almejas a China y Europa, y cuya fundadora y directora ejecutiva es una mujer. El famoso pulpo rojo o el mero (Epinephelus morio) de Yucatán no se exportarían a los Estados Unidos o Europa porque las mujeres realizan una gran cantidad de actividades en las plantas de procesamiento. Algunas pesquerías no contarían con valiosa información biológica para la ordenación pesquera si las mujeres no efectuaran un monitoreo biológico, como ocurre en Baja California Sur. O bien, algunas pesquerías correrían el riesgo de ser sobreexplotadas si las mujeres que participan en las actividades de control de capturas no estuvieran allí para apoyar la actividad pesquera. Estos son algunos pocos ejemplos.Layla: En primer lugar, la cultura y la forma de vida de las comunidades costeras no serían lo mismo. Ni tampoco los distintos empleos relacionados con las cadenas de valor pesqueras y marinas, donde las mujeres cumplen varias funciones. La actividad pesquera sin las mujeres sería una cadena de valor menos diversa, con menos productos y comunidades más pobres, con escaso turismo o sin productos gastronómicos excepcionales. Julie: Estos son ejemplos asombrosos de la increíble necesidad de participación de las mujeres en estas pesquerías y de lo que ocurriría si desaparecieran. En su trabajo, ¿cuáles son algunas herramientas que emplean para lograr una mayor inclusión de las mujeres en el sector y las comunidades pesqueras?
Layla: Las mujeres deben tener voz y ser escuchadas. Las redes de aprendizaje y el SSF Hub son grandes iniciativas para informar y reunir a las personas, así como darles voz a quienes no la tienen. En nuestra labor diaria y la ejecución de nuestros proyectos, no solo debemos garantizar la participación de las mujeres, sino también priorizar la diversidad, igualdad e inclusión, y la justicia ambiental.Ana: En el caso de EDF México y América Latina, nos cercioramos de que las mujeres tengan acceso a todos nuestros talleres y actividades de fomento de capacidades. A su vez, las acompañamos en los procesos que las ayudarán a conseguir un lugar en la mesa de negociaciones cuando se trata de las decisiones de ordenación pesquera y la promoción de la pesca sostenible y la participación comunitaria.
Estamos emprendiendo otras acciones, como crear más espacios donde las mujeres puedan compartir sus historias (en los medios, las redes sociales, los eventos, los simposios, etc.) y lograr que sean visibles a las personas encargadas de la toma de decisiones y otras mujeres que están dispuestas a tener una mayor participación, pero no saben cómo hacerlo. Sus opiniones deben ser escuchadas; nosotras somos meras facilitadoras de espacios.
También reconozco que aún nos queda trabajo por hacer para incorporar completamente una perspectiva de igualdad de género en nuestro trabajo. Como equipo, debemos aprender y ser más conscientes de las desigualdades de género en el sector y la política, y saber cómo abordarlas de forma asertiva y transformadora. Debemos seguir preguntándonos quién está ausente en la mesa de negociaciones, y por qué, para encontrar la manera de igualar el sector para todas las personas.Julie: Como líder de una organización sin fines de lucro dedicada a fomentar la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer en la producción pesquera mundial, ¿qué puedo hacer para apoyar a las mujeres en el sector pesquero y las comunidades donde trabajan?
Ana: Cuando organizas un evento, un proceso de toma de decisiones o una asamblea participativa, debes preguntarte a quién se está excluyendo y por qué. Este ejercicio te permitirá hacerte la siguiente pregunta más importante: cómo incluirlas y adaptar nuestras reuniones y procesos.En el caso de las mujeres, debes apuntar a la igualdad o, al menos, asegurarte de que las mujeres tengan un lugar y un espacio para compartir sus historias. Si estás organizando un evento o un panel o foro, cerciórate de haber invitado a mujeres que se desempeñen como panelistas o presentadoras. Debemos tomarnos el tiempo de escuchar sus historias y ofrecerles asistencia en la preparación. Muchas podrían ser nuevas en esta tarea, y a veces puede ser abrumador.
Asimismo, dado que tuve que adaptar muchos procesos de fomento de capacidades al formato virtual, debes reconocer que la brecha digital es más profunda en las mujeres que en los hombres, por ende, debes ofrecerles a las mujeres opciones para conectarse o participar en las reuniones virtuales. En las OSC´s, solemos pensar que las personas están tan cómodas con la tecnología como nosotros. Sin embargo, nos olvidamos de los problemas de conectividad o de la dificultad que puede existir para acceder a los dispositivos tecnológicos. Por lo tanto, para fomentar la igualdad en un espacio virtual, asegúrate de adaptar las reuniones y sesiones, de modo que las personas puedan acceder o conectarse a través de distintos canales (internet, teléfono, ordenador portátil, teléfono celular, etc.), y crear un entorno donde todas las personas se sientan cómodas. Por ejemplo, dedica tiempo a ofrecer asistencia tecnológica antes y durante las sesiones, y a pensar en metodologías que involucren a todas las personas.
Por otra parte, las mujeres tienden a participar menos en las reuniones virtuales —y nuestra voz no tiene tanto peso como la de los hombres—, por consiguiente, piensa en maneras de incluirlas: utiliza una ventana de chat virtual para compartir opiniones o preguntas, organiza un esquema de «todos contra todos» para debatir determinadas cuestiones y, si el espacio es lo suficientemente seguro, pregúntales de manera directa cuáles es su opinión. Estas son tan solo algunas opciones.
Julie: Como consumidora, mis compras de productos pesqueros están limitadas por lo que encuentro en la tienda, así que mi elección depende de los compradores mundiales, y locales, de productos pesqueros. ¿Qué deberían saber las personas que compran productos pesqueros de su región sobre lo que están comprando? ¿Qué les dirían?Onesya: La cadena de comercialización del cangrejo azul ha involucrado a muchas personas de la comunidad, incluidos los pescadores, las mujeres y los procesadores. La pesquería del cangrejo azul tiene un gran impacto en la economía de las comunidades costeras del este de Lampung. Como compradores, debemos reflexionar sobre el significado que tiene la pesca del cangrejo azul en la comunidad local con respecto a su contribución a los medios de subsistencia.
Layla: Es muy importante comprar productos pesqueros producidos en su región, como los peces capturados en las zonas cercanas. No solo porque es más saludable, sino también porque apoyan a las comunidades costeras de su región. No tiene sentido comprar productos pesqueros del extranjero cuando tienen a su alcance productos diversos, únicos y de alta calidad en el lugar donde viven.Ana: En primer lugar, honrar y agradecer a las personas que están detrás de nuestro plato de comida: desde la persona que se encarga de pescar hasta la persona que lo lleva a su mesa. La pesca también se trata de las personas, no solo de los peces.
En segundo lugar, preguntar quién realizó la pesca y dónde, de modo que tengamos la seguridad de que no estamos consumiendo un producto en época de veda, o de un lugar donde esta actividad está prohibida. Siempre que sea posible, apoyen a los pescadores sostenibles locales.
Julie: Gracias Onesya, Ana y Layla por esta conversación sincera sobre las mujeres en el sector pesquero. Siempre es muy útil escuchar estas historias de la fuente, por lo que les agradezco sus opiniones y les deseo que tengan mucho éxito en su trabajo futuro con estas comunidades pesqueras.
