Riesgos ante el inicio de la temporada de curvina sin medidas de protección para la vaquita y la pesquería

La captura de la curvina golfina podría iniciar antes de lo esperado en el Alto Golfo de California, sin contar con las medidas de manejo necesarias para continuar demostrando que esta pesquería no afecta a la vaquita marina. En previas ocasiones (2016, 2017), EDF de México ha abogado por mejoras a las medidas de manejo de la pesquería y ha asesorado a autoridades, ofreciendo además ayuda con su implementación. Permitir cualquier actividad pesquera en el Alto Golfo sin mejoras a las medidas de manejo tendrá serias implicaciones. Por lo tanto, exhortamos al Gobierno de México y las comunidades pesqueras a adoptarlas lo antes posible.

La pesquería de la curvina golfina es una de las más ordenadas y reguladas de nuestro país, gracias a la adopción de medidas de manejo que han asegurado el aprovechamiento sustentable del recurso. Éstas incluyen un método de pesca selectivo y un sistema de manejo basado en derechos. En conjunto, estas herramientas de manejo han logrado proteger al recurso, disminuyendo las capturas totales a la mitad del máximo histórico e incrementando al mismo tiempo sus rendimientos económicos, estabilizando precios y reduciendo costos.

A pesar de estos avances, el panorama para la pesquería de la curvina golfina se ha complicado ante la creciente pesca furtiva de totoaba y sus impactos en la población de la vaquita marina. De acuerdo al último reporte del Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita Marina (CIRVA) existen solo 30 ejemplares de vaquita marina, una situación extremadamente delicada y por la que en EDF de México nos encontramos sumamente preocupados. A pesar de no existir evidencia de que el arte de pesca autorizado en la pesquería de curvina interactúa de manera directa con la vaquita o la totoaba en dicho reporte, existe la percepción de que esta pesquería pudiera servir como encubrimiento a la pesca furtiva de totoaba.

Concordamos con otros expertos en que la pesca furtiva ocurre durante todo el año sin importar cuáles pesquerías legales se encuentre operando. Por lo tanto, para asegurar el futuro de cualquier pesquería legal en el Alto Golfo, existe una urgente necesidad de contar con medidas de manejo y monitoreo que diferencien las actividades legales de aquellas que son ilegales.

A pesar de que el Gobierno mexicano ha impulsado medidas de protección para la vaquitamayor inspección y vigilancia y la suspensión temporal de gran parte de la actividad pesquera del Alto Golfo, la pesca furtiva de la totoaba ha persistido. Ante esta situación, científicos, organizaciones de la sociedad civil y el mismo sector productivo han hecho fuertes llamados a las autoridades (federales y estatales ) a favor de una inspección, vigilancia y monitoreo más efectivos. Asimismo, se ha solicitado asegurar la pesca legal en el Alto Golfo a través del desarrollo de artes de pesca y medidas de manejo.

Es crítico que implementemos un sistema que permita a las autoridades diferenciar entre la pesca legal de la furtiva en el Alto Golfo. EDF de México, en conjunto con el sector pesquero, autoridades, científicos y socios clave, desarrolló y validó una serie de medidas para alcanzar este objetivo, incluyendo una ruta crítica que no ha sido implementada en tiempo y forma. Estas medidas incluyen:

  • Uso obligatorio de dispositivos de localización las 24 horas del día en todas las pangas.
  • Un padrón confiable de embarcaciones con matriculación inequívoca y clara de las mismas.
  • Información transparente y accesible para que todos, incluyendo autoridades involucradas en la vigilancia del Alto Golfo de California, puedan identificar rápidamente quién cumple las reglas y quién está por fuera de la ley.
  • Segregaciones espaciales y temporales para garantizar que no haya embarcaciones curvineras en zonas de mayor pesca furtiva.
  • Protocolos de contingencia de rápida acción en caso de observar una vaquita marina para que la flota curvinera, en su totalidad, interrumpa la captura en esa zona.

Dichas medidas no reemplazan, sino complementan las ya existentes, incluyendo la captura total permisible, la Norma Oficial Mexicana para la Pesca Responsable de Curvina NOM-063-PESC-2005, el Plan de Manejo Pesquero de Curvina Golfina, la Veda de la Curvina Golfina, así como el Plan de Manejo de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo y Delta del Río Colorado.

La falta de implementación de estas medidas adicionales pone en riesgo a la pesca responsable de la curvina golfina. Sin compromisos y mecanismos transparentes que garanticen la protección de la vaquita marina y ayuden a demostrar la no interacción de la pesquería con actividades furtivas, los avances logrados hasta el momento podrían revertirse en detrimento de las especies y comunidades de la región.

EDF de México solamente puede apoyar a la pesquería de curvina golfina si se incorporan las medidas necesarias para demostrar que no tiene ninguna interacción con la totoaba o la vaquita. Por lo tanto, hacemos un llamado urgente al Gobierno y al sector pesquero que captura curvina a acordar estas medidas y comprometerse a seguirlas, de otra manera el futuro de esta pesquería está en riesgo. Estamos convencidos de que si autoridades, sector pesquero y OSC tomamos acciones inmediatas, podremos mantenernos en el camino hacia la sustentabilidad y la prosperidad. Mientras exista el compromiso de todos, seguiremos trabajando a favor de la pesca legal y ordenada, asegurando un futuro prometedor para las especies del Alto Golfo y sus comunidades.